Tipos de abono

Los orgánicos son abonos de acción lenta ya que, para que sus elementos sean absorbidos por las plantas, necesitan una transformación previa. Los más destacados son los siguientes.

Mantillo
Se origina por la fermentación del estiércol o de otras materias orgánicas. El mantillo deberá estar siempre bien fermentado. pues de lo contrano no destruirá las semillas de las malas hierbas. Nunca debe emplearse sin mezclar porque puede producir quemaduras o transmitir enfermedades que dañen irreversiblemente las plantas.

Compost
Es una mezcla de matena orgánica descompuesta. como, por ejemplo, restos de vegetales. Se emplea para acondicionar y fertilizar las tierras de cultivo. Aunque es un tipo de abono orgánico de bajo contenido en los elementos nutrientes básicos (nitrógeno, fósforo y potasio), aporta humus y mejora la estructura del suelo.

Otros tipos
Existen otras sustancias orgánicas con las que uno mismo puedehacerse su propio abono. Este es el caso de los desperdicios de la comida como las peladuras, los posos de café e, incluso, la harina de huesos. También es posible hacer abonos orgánicos con las cenizas de madera, los artículos de punto de fibra natural o los penódicos. Si los abonos se hacen con los restos orgánicos del jardín, hay que procurar desechar el material enfermo y las hojas perennes.

Abono orgánico líquido

Una forma de fertilizar las plantas con abono orgánico es aplicándolo en forma liquida, ya que resulta más cómodo y práctico de utilizar. Para ello, hay que disolver el abono en agua y después regar la planta con esta disolución, Conviene no excederse con este tipo de abono ya que, al absorverlo la planta rápidamente, puede resultarle dañino.

Cómo aplicar el abono de cobertera
1 Primero se escarba o remueve superficialmente la tierra alrededor de las plantas con un rastrillo o binador, teniendo cuidado de no dañar la raíz.

2El abono se extiende en finas capas sobre la tierra, mezclándolo con ésta. Nunca hay que olvidar regar después de abonar.

Los abonos orgánicos

La materia orgánica, rica en microorganismos tan necesarios para mantener la tierra del jardín en buenas condiciones, termina transformándose lentamente y desaparece. Para compensar estas pérdidas, es necesario que el suelo reciba nuevos aportes con el fin de mejorar su estructura y aumentar su fertilidad y su fauna beneficiosa (lombrices, larvas, etcétera). Ésta es la función de los abonos que proceden de la descomposición de sustancias animales o vegetales.

Otros tipos de sustratos

Materiales inertes que se añaden a los sustratos con el fin de que sea mayor la aireación y retengan más agua.

Perlita
Materia de origen volcánico de propiedades análogas a la arena Es interesante como absorbente de abonos y agua, que posteriormente elimina de forma gradual.

Vermiculita
Se caracteriza por su elevada capacidad de absorción del agua y las sustancias nutritivas.

Arcilla expandida
Se obtiene sometiendo un tipo de arcilla a 1.200° C. Estas arcillas son capaces de absorber hasta un 50% de su propio peso, lo que les permite conservar la humedad óptima para la planta. Por otro lado, también aligeran y oxigenan el sustrato de cultivo.

Poliestireno expandido
Es un matenal plástico derivado de los procesos industriales. Se emplea con la finalidad de disgregar el sustrato.

Sustratos

Los sustratos son tierras de cultivo ya preparadas que se añaden al terreno cuando éste presenta deficiencias de nutrientes o de estructura. También pueden utilizarse en macetas y jardineras. Estas mezclas de tierra son muy equilibradas en su composición y propician un medio idóneo para el desarrollo de las plantas.

Mezcla de sustratos
Existen diferentes tipos de sustratos y materiales inertes para mejorar el terreno.

Clases de sustratos
Antes de plantar en el jardín. conviene invertir un poco de tiempo y tratar de mejorar tanto su textura como su fertilidad añadiendo los sustratos necesarios. A continuación se citan los más indicados.

Turbas
Se pueden encontrar turbas negras y rubias, extraídas, sobre todo, de los países del norte de Europa (las turbas de la Península Ibérica son de peor calidad). Estos dos grandes grupos se diferencian por su grado de descomposición. Las negras se encuentran a mayor profundidad y están más descompuestas, de ahí su color oscuro. Se emplean para hacer semilleros, ya que permiten que haya una humedad constante, muy beneficiosa para que germine la semilla Por el contrario, las turbas rubias se localizan a menor profundidad y se emplean en las plantas cultivadas en maceta ya que retienen bien la humedad.

Mezcla de tierras
En el mercado se pueden encontrar numerosas mezclas de tierra ya preparada. Las siguientes son las más aconsejables.

Mezcla de brezo
Resulta una tierra acida, poco rica en nutrientes, de una gran porosidad y que ofrece un buen drenaie. En su mezcla contiene tres cuartas partes de tierra acida que la hacen muy aconsejable para cultivar rododendros, brezos, etcétera.

Mezcla de turba
Se compone de una parte importante de turba y otra de arena gruesa o perlita. De reacción acida, resulta una mezcla pobre en nutrientes que se debe regar adecuadamente. Se utiliza sobre todo para los semilleros.

Mezcla de tierra clásica
En los centros de jardinería se pueden encontrar ciertas mezclas ya elaboradas de tierra, que se suelen componer de un tercio de tierra corriente del jardín. un tercio de turba y otro de arena. Es una mezcla muy equilibrada en nutrientes, por lo que resulta ideal para una amplia gama de plantas.

Cómo averiguar el tipo de tierra del jardín

Tierra arenosa
La tierra arenosa posee una textura seca, es ligera y se resbala fácilmente de las manos.

Tierra arcillosa
La tierra arcillosa es suave, pegajosa, oscura y tiene una buena capacidad para retener el agua

Determinación de la textura de la tierra
Se coge una muestra de la tierra del jardín. Una ve; que esté bien seca, se desmenuza y se trilla. Se llena por la mitad un tarro de cnstal con la muestra y se añade agua poco a poco hasta casi llenarlo. Se agita enérgicamente. dejándolo reposar durante unas horas Pasado un tiempo se podrá observar en el londo del Irasco una capa de arena gruesa, otra mas lina y, por último, una materia muy fina, quirá de otro color Uimo y arcilla), lo que nos dará el porcentaje de la textura de la tierra.

Enmiendas

Tras examinar las propiedades del suelo y ver de lo que carece, se deben corregir esas deficiencias: para ello, se aplicarán ciertas enmiendas. Esta operación consiste en añadir al terreno determinadas sustancias a fin de modificar sus propiedades de estructura y textura. En el caso de que sea un terreno poco permeable, habrá que añadir arena: humus (producto que resulta de la descomposición de la materia orgánica, como por ejemplo, el humus del estiércol), si los suelos son pobres y con estructura deficiente; o también cal. con el fin de neutralizar la acidez del terreno y elevar su pH.

Plantas más adecuadas según las características del terreno

Tierra acida
Una tierra acida puede tener un contenido arcilloso, arenoso o de ambos. La mayoría de las plantas pueden vivir sin problemas en este medio. Algunos ejemplos son la camelia, la corallina, la hamamelis, la kalmia. la magnolia y el rododendro

Tierra arenosa
Es propensa a secarse y no se mantiene muy fértil. Aunque se trabaja con facilidad, las plantas van a requerir una atención especial, ya que esta tierra no retiene bien los nutrientes. Se cultivan bien en ella la milemrama, la artemisa. la lavanda, la jara, el verbasco y el romero

Tierra alcalina
Los tipos de planta que se pueden cultivar en el terreno alcalino son limitados, ya que influye la mala absorción de algunos nutrientes como el hierro y el magnesio. Sí se pueden cultivar en estos terrenos la milemrama, las campanillas, el tulipán, la malva, el acanto, el ajo, y las anémonas

Tierra arcillosa
Retiene con eficacia los nutrientes y la humedad. Por lo general es muy fértil, aunque resulta difícil de trabajar. Las plantas adecuadas para este tipo de tierra son el cornejo, el ciruelo mirabolano, los rosales, los geranios, la clemátides o la aucuba

Método para saber el pH del suelo

En un frasco de cristal se echa una muestra pulverizada de tierra del jardin y dos parles de agua destilada IpH neutro); a continuación se agita. Cuando se ha estabilizado la mezcla, se sumerge una tira de papel de tornasol y de venta en (armadas) y se observa el color resultante al sacarla: el rojo indica acidez y el azulado. alcalinidad.

Características del terreno

Entre los elementos más importantes e imprescindibles para que las plantas vivan y se desarrollen se encuentran el suelo, o la tierra, y los abonos. Del primero depende que las plantas encuentren la sujeción, el agua y el alimento que necesitan y es, además, donde se desarrolla la raíz. No todas las tierras son igualmente aptas ni reúnen los elementos necesarios o suficientes para realizar con éxito las labores de jardinería. Dependiendo de lo que se quiera cultivar, habrá
que tener en cuenta tanto las características del terreno como los nutrientes que aportan los abonos.

Factores del suelo
Cada terreno tiene determinadas características físicas y químicas que hay que tener en cuenta antes de cultivarlo.

Tempero
Se denomina así al grado óptimo de humedad que necesita el suelo para la realización de las labores en el jardín. Cuando la tierra no tiene la humedad suficiente, tanto la siembra como el desarrollo de las plantas se hacen más lentos y difíciles.

PH
Indica la acidez o alcalinidad del suelo, factor éste muy importante, pues limita el uso de ciertas plantas. El valor neutro es el 7. Las cantidades inferiores indican acidez y las superiores, alcalinidad. Una tierra muy acida retiene poco los nutrientes, mientras que un terreno alcalino asimila mal el hierro, mineral fundamental para la fotosíntesis.

Textura
Aunque a simple vista en el suelo sólo se distingue lo que se viene a llamar 'tierra', además de piedras o piedrecitas esa tierra está formada por partículas de distintos tamaños que le confieren su textura. La parte más visible, granulada, gruesa o fina, se llama arena: y otra parte menos visible y muy fina está compuesta por arcilla y limo. Dependiendo de la proporción entre sus componentes, el suelo será más arenoso, con mayor permeabilidad, una buena aireación y poco fértil, o más arcilloso, con menor permeabilidad, difícil de labrar y rico en sustancias nutritivas.

Cortadores de CÉSPED

Cortacésped mecánico
Muy común en los jardines, se ha hecho prácticamente indispensable a la hora de mantener en buen estado el césped. Para realizar su labor de siega, esta máquina se desliza sobre ruedas. Se distinguen dos tipos, helicoidales y rotativas, según el sistema de cuchillas que lleven.

Cortacésped helicoidal
Posee un eje horizontal que hace girar un cilindro con varias cuchillas hacia el extenor. El tambor de corte es propulsado por las ruedas (en el caso de los cortacéspedes manuales) o por un motor. Las cuchillas se afilan automáticamente al rozarse unas con otras, lo que reduce la tarea del afilado. Se recomienda para las praderas extensas que se recorten muy a menudo. Presenta el problema de que funciona mal con la hierba alta y que. para su mantenimiento, requiere el asesoramiento de un experto.

Cortacésped rotativo
Es el que más comúnmente se emplea. Su eje de cuchillas es vertical y suele estar conectado al motor. Requiere un mantenimiento más continuado, ya que es fácil que la cuchilla se golpee y haya que afilarla a menudo. Es una máquina muy robusta de motor y apta para zonas con pendiente.

Cortacésped de colchón de aire
Muy adecuado para trabajar en jardines pequeños. Se acciona con electricidad, Su innovación consiste en que, a modo de aspiradora, absorbe y almacena el aire en su interior, provocando que se eleve de forma ligera sobre la superficie. Ño tiene ruedas y resulta muy ligero.

Sierra mecánica
Es una herramienta de envergadura que funciona con electricidad o con motor de explosión. Se utiliza, sobre todo, para podar árboles.

Cortasetos
Permite agilizar las labores de poda. al tiempo que consigue una mayor calidad en el resultado lina! del corte. Es idóneo para el recorte de setos y un gran número de arbustos.

Desbrozadora
Mediante un hilo de nailon, esta máquina siega la maleza del jardín. Resulta muy adecuada para perfilar el césped y las zonas a las que la segadora no puede acceder.

Mantenimiento de la maquinaria
Durante el invierno hay que mantener la maquinaria protegida y guardada en un lugar seco. No hay que olvidar hacer una revisión antes de que linalice la época de labores del jardín

Elección del cortacésped

A la hora de comprar un corla-césped son dos los factores a tener en cuenta:

1. Superficie a segar: si la pradera tiene menos de 500 m se recomiendan los modelos eléctricos: en cambio, para las que tengan más de 2.000 m- son aconsejables los de combustible y con tracción en las ruedas.

2. Pendiente: se debe tener siempre presente que las maquinas de cuatro tiempos (las que llevan el aceite y la gasolina en dilerentes depósitos) no se deben utilizar en jardines con fuerte pendiente. En estos casos son más adecuadas las segadoras de dos tiempos, ya que utilizan como combustible una mezcla de gasolina y aceite (10%) que a la vez que alimenta el motor, lo lubrica.

Maquinaria

Para aquellas labores del jardín que resultan más pesadas, como puede ser cortar el césped o recortar los setos, existen máquinas que facilitan el trabajo y ahorran mucho tiempo. La mayor parte de la maquinaria que se detalla a continuación se encuentra en el mercado en dos modalidades: alimentada por electricidad o por combustible, esto es, con motor de explosión. Las ventajas de la maquinaria eléctrica frente a la de motor de explosión son, fundamentalmente, de tipo económico; aunque la ligereza y el menor ruido que produce podrían ser otras de las prestaciones de estas herramientas. Sin embargo, no hay que olvidar que las máquinas eléctricas disponen de menor potencia de trabajo, lo cual puede resultar un inconveniente.

Limpieza y cuidado de las hojas

Las hojas de los útiles de corte deben estar siempre bien afiladas y limpias. No hay que olvidar engrasarlas frecuentemente con un paño empapado en aceite. Además, es conveniente desinfectarlas para impedir que se trasmitan bacterias a la planta al podar la rama.

Uso del hacha

Esta herramienta sólo se puede utilizar para cortar madera ya muena. Nunca se debe emplear para la poda de árboles vivos, ya que el corte del hacha, al no ser limpio, dificulta la cicatrización del árbol, por lo que las probabilidades de que éste enferme aumentan.

Guantes de jardinería

Son imprescindibles para protegerse las manos, sobre todo en el cuidado de ciertas plantas como los rosales.

Navajas de injertar

Existen diversos modelos según el tipo de corte o incisión que se vaya a realizar con ellas. Es imprescindible que el filo de la hoja esté siempre en buen estado. pues con estas navajas se realizaran cortes muy precisos.

Sierras

Sierra de dientes finos
Su corte resulta muy adecuado para la poda de ramas de grosor medio.

Sierra de arco
Es muy eficaz para cortar las ramas de gran envergadura.

Sierra de pértiga
Si las ramas están a gran altura, con esta herramienta se puede realizar el corte desde el suelo. Existen modelos con mango telescópico que permite alcanzar ramas que estén a una altura de hasta 3.80 metros: este tipo de sierras suelen tener los dientes cruzados para evitar que se enganchen.

Herramientas de Corte

Si con los pequeños útiles de jardinería se puede sembrar y ver crecer las plantas, los árboles y los arbustos, con las herramientas de corte se conseguirá estimular su crecimiento y mejorar el aspecto global del jardín. Para podar y recortar existen dos grupos de herramientas de corte:
las tijeras y las sierras.

Tijera de setos o cizalla
Resulta adecuada para la poda de setos y pequeños arbustos. Sus mangos fuertes y las hojas anchas y alargadas retienen la rama podada una vez practicado el corte.

Tijera clásica de jardinero
Es el modelo tradicional, con dos hojas curvas, que se utiliza con una mano. Su diseño ergonómico reduce el esfuerzo al mínimo.

Podadera
Permite cortar limpiamente ramas de hasta 45 milímetros de diámetro sin apenas esfuerzo. Gracias a sus largos brazos, tiene gran potencia y una mayor accesibilidad para el corte de las ramas altas.

Podadera de yunque
Es la herramienta más útil para la poda de frutales y arbustos de gran tamaño, ya que corta con facilidad ramas duras de cierto grosor.

Uso de la tijera de jardinero y de la podadera
Las tijeras son las herramientas mas apropiadas para cortar tamo los tallos de las plantas cultivadas en macetas como las ramas pequeñas. La podadera se utiliza para cortar as ramas de arbustos como los rosales y los frutales

Herramientas para el jardín

Pala plana o pala jardinera
Es una herramienta fundamental tanto para plantar y trasplantar como para voltear la tierra.

Rastrillo
Se utiliza para la limpieza y el refinado del terreno una vez que se ha concluido la labor de cava.

Escoba de jardinero
Después de la siega, resulta una herramienta muy adecuada para la recogida, tanto de las hojas como del césped. Tiene varillas metálicas, planas y elásticas.

Ragadera
Se utiliza fundamentalmente para eliminar las malas hierbas, aunque también sirve para romper la costra superficial del terreno. Tiene una cuchilla horizontal sujeta por dos brazos curvados unidos al extremo inferior del mango.

Azada
Esta es, quizá, una de las herramientas más útiles. En función de su tamaño y utilidad, se la denomina azadilla, azada o azadón. Con la azada se voltea la tierra, se remueve alrededor de los árboles o arbustos y se rompe la corteza del suelo. Con la azadilla también se puede remover la tierra en tomo a las plantas de raíz poco profunda y quitarles las malas hierbas.

Mochila de tratamientos
Se emplea para aplicar los herbicidas. Los modelos más corrientes tienen una capacidad de 5 y 16 litros. La elección de uno u otro se hará en función del tamaño del jardín. Suelen presentar una boquilla regulable con la que se concentra o se dispersa la salida del producto.

Plantador de bulbos

Con esta práctica y pequeña herramienta se pueden plantar bulbos de forma rápida, introduciéndolos a la profundidad deseada en un hoyo con un diámetro de hasia 18 centímetros. La tierra que se extrae queda dentro del plantador y se expulsa con una simple presión del dedo en la empuñadura.

Herramientas para las plantas del hogar

Trasplantador
Es una pequeña pala que se utiliza para hacer trasplantes en las jardineras y macetas.

Tridente
Sirve para softar y mullir la tierra alrededor de las plantas.

Escarificador de mano
Muy útil tanto para descortezar y mullir la tierra como para arrancar las malas hierbas. También resulta adecuado en el cuidado de los macizos florales del jardín.

Pulverizador
Es muy eficaz para dotar de humedad a las plantas y mantener las hojas limpias de polvo. Además, se utiliza para humedecer la tierra de los pequeños semilleros.

Regadera
Aunque su uso está más extendido dentro del hogar, también puede utilizarse en el jardín para regar las flores delicadas que no aguantan el chorro a presión.

Pequeños útiles

Las herramientas empleadas en jardinería ayudan a realizar las numerosas labores del jardín o la terraza de una forma eficaz, rápida y cómoda. Tanto si se trata de plantar una azalea como de podar un rosal o cortar el césped, se puede encontrar en el mercado una variada y amplia gama de útiles adecuados para facilitar cada labor. Dentro de este grupo se enumeran las herramientas básicas que todo aficionado necesita para el cuidado del jardín, sin olvidar las que resultan imprescindibles para atender las plantas del hogar.

Podas

Una forma de fortalecer el desarrollo de los árboles y arbustos, además de ayudar a configurar su forma y estructura, es la poda. Para llevar a cabo esta técnica conviene saber no sólo su procedimiento, sino también sus diferentes modalidades, asi como la época más conveniente para realizarla en cada caso.

Suelos y Abonos

El suelo es el lugar donde la planta encuentra su sustento y las sustancias nutritivas que le permiten desarrollarse adecuadamente. Por ello, conocer los diferentes tipos de terreno, así como sus características, constituye el pnmer paso a seguir para el aficionado a la jardinería. Junto a los suelos. los abonos son los nutrientes indispensables, tanto para la tierra como para las plantas.

Plantación y trasplantes

Para conseguir una plantación adecuada a cada especie, es necesario conocer los métodos más correctos y las épocas más favorables para ello, de manera que las plantas no se marchiten ni resequen De igual forma. es conveniente tener unos conocimientos necesanos para que al trasplantar una especie no muera en el intento.

ÚTILES DE JARDINERÍA

El cultivo de las plantas del hogar o del jardín es una labor que se realizará de forma eficaz si se utilizan las herramientas más adecuadas en función de la actividad que se vaya a desarrollar. Hay una extensa gama de utensilios que se consiguen en el mercado, desde los pequeños útiles para la casa hasta las máquinas eléctricas o mecánicas.

Plagas y enfermedades

Las plantas, como todo ser vivo, no están libres de las enfermedades y plagas, que las pueden dañar
senamente o. incluso, provocar su aniquilamiento. Sin embargo, existen productos específicos para atacar las plagas, así como útiles consejos y recomendaciones para tratar los distintos tipos de enfermedades.

Riegos

El agua es el alimento y una de las partes más esenciales de !a planta. Hay numerosos sistemas de negó para el jardín, la terraza o el intenor de la casa, como la clásica regadera, la manguera o los modernos y sofisticados sistemas de riego por aspersión, difusión o negó localizado. Saber cómo utilizarlos y cuál es más conveniente para cada planta debe ser un conocimiento básico para toda persona que se quiera introducir en la lardmería.

MÉTODOS DE REPRODUCCIÓN

Existen diferentes maneras de multiplicar las distintas plantas del jardín o el hogar. Dependiendo de las características de cada especie, del lugar donde se lleve a cabo y de la época. será más conveniente la reproducción mediante semillas, un esqueje o con un acodo.